11.4.10

La oveja negra***

En un lejano país, existió hace muchos años una oveja negra.

Fue fusilada.
Un siglo después, el rebaño arrepentido le levantó una estatua ecuestre, que quedó muy bien en el parque.
Así, en lo sucesivo, cada vez que aparecían ovejas negras eran rápidamente pasadas por las armas, para que las futuras generaciones de ovejas comunes y corrientes pudieran ejercitarse también en la escultura.

***AUGUSTO MONTERROSO, genial escritor guatemalteco (1921-2003). Uno de los más grandes del microcuento. 

2 comentarios:

Sebastián Sacoto Arias S. dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Cristina Arboleda dijo...

me encanta Augusto Monterroso! besos.